Areva y Schneider Electric han firmado un acuerdo en el campo del I+D para desarrollar una nueva solución de almacenamiento de energía. La tecnología empleada, conocida como batería de flujo continuo, permite producir y almacenar la electricidad mediante la combinación de ácido bromhídrico e hidrógeno.
Financiado por la Unión Europea, el proyecto tiene como objetivo optimizar un prototipo de batería de flujo de 50 kW ya existente desarrollado por la compañía EnStorage para crear un módulo de demostración de 150 kW. Bajo los términos del acuerdo, las dos firmas pondrán a prueba la batería de flujo continuo en condiciones reales. El objetivo es proporcionar una solución de almacenamiento competitiva para el despliegue de las energías renovables.
Areva será quien liderará el proyecto y será responsable de la fabricación, integración e instalación de la solución de almacenamiento, mientras que Schneider Electric se encargará del diseño, fabricación e instalación del sistema de conversión eléctrica complementario. Esta colaboración se suma a la que ambas compañías firmaron en febrero 2014 para el desarrollo de la Greenergy Box, una solución de almacenamiento y gestión de la energía basada en la producción de hidrógeno y la pila de combustible.
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